Tras una larguísima espera a raíz de varios retrasos, este año el Escuadrón Suicida finalmente vio el lanzamiento de su propio juego que como se podía presentir no le fue para nada bien, sino todo lo contrario. Y esto es algo que se percibió en el bolsillo de la empresa que creó la saga de Arkham, perdiendo varios millones de dólares según ahora se ha revelado.